lunes, 5 de julio de 2021

¿Qué historia enseñar en el siglo XXI?

 

¿Qué historia enseñar en el siglo XXI?     

Cada vez la enseñanza de la historia se ve distorsionada por los proyectos educativos que proponen los gobiernos. Tal como sucede en la situación mexicana, hace apenas unos meses el actual gobierno emanaba en sus discursos la derogación de la Reforma educativa peñista, así como fortalecer la educación nacional a través de la Historia, Formación cívica y ética donde la finalidad es formar a los niños y jóvenes como ciudadanos  y participes de su comunidad (SEP, 2019)

A un año del triunfo de Andrés Manuel López Obrador, la educación apenas toma un rumbo incierto, maestros que fueron capacitados con la Reforma Educativa Peñista, difícilmente comprendieron los principios del modelo educativo, así como ponerlos en práctica en las aulas, puesto que en los últimos meses debían prepararse para conocer el proyecto educativo del nuevo gobierno, donde la prioridad debe enfocarse en una educación gratuita, laica y obligatoria pero sobretodo pluricultural dando espacio a las ciencias humanas (SEP, 2019).

Muchos son los discursos de mandatarios que dan a conocer a la educación como la herramienta vital y progreso de una nación. Sin embargo, todavía hacen falta maestros comprometidos con su labor, capacitados para impartir una clase de matemáticas, de historia o de español. Son los docentes quienes no preparan su clase, improvisan, por ese motivo, se está discutiendo su manera de enseñar (Recio, 2012, p.4)

En ese sentido ¿Qué se está enseñando en las aulas? ¿Qué se hace en la materia de historia? Las sociedades utilizan la historia para  legitimar las acciones tanto políticas, sociales como culturales. Sí en los programas educativos se da a conocer que la enseñanza de la historia, debe facilitar la comprensión del presente, estudiar el cambio y la continuidad en las sociedades, además de potenciar el análisis de lo social, político y económico (Prats, 2001, p.14) En el aula, solo se está utilizando el libro del texto sin analizar otras fuentes para el estudio de la historia; el propósito no es formar científicos en esta rama, pero si acercar al alumno a la realidad de como se hace la historia. (Recio, 2012, p.9). Por lo tanto, se requiere una enseñanza libre, democrática, critica y creativa (Recio, 2012, p.5).

 

Referencia:

Prats Joaquín, (2001). Enseñar Historia: Notas para una didáctica renovadora. Consejería de educación, ciencia y tecnología, Mérida, pp. 1-127.

Recio Cuesta, Juan Pedro. (2012). El valor de la Historia en la aulas. Retos ante un nuevo contexto educativo. Clío 38, pp. 1-16.

Secretaría de Educación Pública (2019). Recuperado de: https://www.gob.mx/sep/articulos/leyes-secundarias-del-acuerdo-educativo